La ONG de defensa de los derechos de los animales PETA ha pedido a Michael Jackson que no convierta sus conciertos de la gira “This is it” en una especie de circo con elefantes, tigres, serpientes, pájaros tropicales y monos, como tiene previsto. Amenazan con boicotear los 50 shows programados por el artista si no se replantea su posición. PETA no quiere ver cómo Michael Jackson comienza sus espectáculos a lomos de un elefante cual Atila del s.XXI.
Otras ideas bizarras para engrandecer los shows con los que el bueno de Michael se ha iluminado es
la intención de contratar a 100 guerreros Masai. Recordemos que este pueblo nómada puebla las llanuras del
Serengeti y otras zonas entre Kenia y Tanzania. Esta es la conversación inventada entre dos masais: “oye tú, un blanco que antes era negro ofrece una pasta para que nos vayamos en avión a no sé cuantas ciudades y bailemos y saltemos con nuestras lanzas mientras el tipo canta rodeado de elefantes, panteras y serpientes”. Responde el otro: “Estos blancos están fatal de la cabeza. No hay peor blanco que el nuevo blanco”.
El plan es dar los conciertos más espectaculares de la historia. No basta con resucitar a muertos ni ser el rey del pop, ahora Michael Jackson quiere ser el rey de la selva. Según desvela el periódico
Mirror, que se basa en fuentes cercanas al cantante, éste “quiere montarse en un elefante africano y salir escoltado por panteras con cadenas doradas. Loros y otros pájaros volarán alrededor de él. Si todo sale como está planeado, el resultado será increíble”. Y si no sale como está planeado, y las panteras se comen a Michael, el resultado será igualmente increíble, ¿verdad?. Show must go on.
PETA lo tiene claro. El director de la campaña, Craig Redmon, considera que:
Explotar a los animales de esta forma es algo que forma parte del pasado, y nada ni nadie como Michael Jackson debería hacerlo. Esto podría convertirse en un espectáculo circense, una práctica a la que se opone la sociedad británica, y le pedimos a él y a su manager, que no eche a perder el show empleando animales.
Igualmente, la organización se ha dirigido a los responsables del estadio O2 Arena para que impidan este tipo de alardes en sus instalaciones. Los representantes de Michael Jackson, por ahora, no han dicho esta boca es mía y se desconoce, pues, si pretenden seguir con sus planes. De hacerlo, no sería extraño que PETA secuestrara los animales e intentara que fueran acogidos a los nuevos refugios para animales con que pretenden convertir los zoos. Ni tampoco lo sería que hicieran anuncios donde todos salieran en pelota picada.